La fractura del tobillo es la fractura de la superficie articular inferior del peroné y el hueso tibial, que forma la articulación del tobillo. Debido a diferentes condiciones de lesión, puede causar fracturas de eversión y rotación externa, fracturas de inversión, que pueden ser fracturas unilaterales, fracturas bilaterales o fracturas trilaterales (refiriéndose a la fractura de la porción anterior o posterior del peroné y la fractura de la porción anterior o posterior del hueso tibial), y en casos graves pueden acompañarse de luxación y rotura del ligamento tibiofibular.
Después de la fractura, el tobillo no solo tiene dolor, hinchazón, moretones y disfunción, sino que también puede aparecer deformidad y movimiento anómalo. La radiografía también puede proporcionar información sobre la fractura. Debido a que la fractura del tobillo es una fractura intraarticular, su principio de tratamiento es intentar una reducción anatómica, una fijación segura y una actividad articular adecuada. Tratar de restaurar su función y prevenir la artritis traumática secundaria. Para aquellos que no pueden tener éxito en la reducción manual o la fijación externa, se debe practicar la reducción quirúrgica lo antes posible, utilizando tornillos o clavos de Kirschner para la fijación interna.
La fractura del tobillo es común en el día a día, especialmente las lesiones de los ligamentos del tobillo. Generalmente ocurre durante el desplazamiento, el trabajo y el ejercicio físico, y se conoce como esguince del tobillo. Sin embargo, la fuerza violenta puede causar fracturas, como lesiones por caídas, golpes y lesiones por rodadura. Las lesiones por armas de fuego en el tobillo también son comunes en tiempos de guerra. Debido a que la circulación del tobillo es mala y se encuentra en una posición baja del cuerpo, es más susceptible a la hinchazón después de la lesión, y la capacidad de curación y resistencia a la infección es mala, lo que resulta en un tiempo de recuperación más largo; las lesiones de hueso y articulación son propensas a deformarse y a la rigidez de la articulación, las principales deformidades incluyen la deformidad de flexión del tobillo, lo que afecta gravemente la función de carga y caminar del paciente, y se debe prestar atención a su prevención en el tratamiento.