El tratamiento del síndrome de descenso del periné incluye tratamiento no quirúrgico y tratamiento quirúrgico, los detalles son los siguientes:
I. Tratamiento no quirúrgico
1II. Hábitos de defecación saludables: Cultivar el hábito de defecar a tiempo, evitar el esfuerzo excesivo al defecar, evitar que el tiempo de defecación sea demasiado largo, no debe superar10min; se puede aplicar adecuadamente un fármaco fibroso para ayudar a defecar, evitando así que se agrave el daño a los músculos del suelo pélvico.
2II. Refuerzar el ejercicio de elevación del ano: La función de los músculos del suelo pélvico se manifiesta principalmente en la contracción y relajación del ano, este movimiento se realiza por complejos mecanismos de coordinación de los esfínteres anal internos y externos, el músculo elevador del ano y otros. El método de ejercicio puede adoptar la posición de pecho y rodillas u otras posiciones, acompañado del ejercicio de los músculos elevadores del ano y la respiración, la contracción de los músculos del suelo pélvico durante la inspiración y la relajación durante la exhalación, así, una inspiración y una exhalación, una relajación y una contracción, son el método básico para aliviar el descenso del periné y restaurar la tensión de los músculos del suelo pélvico.
3I. Tratar enfermedades asociadas: Para aliviar los síntomas y evitar un daño adicional a los músculos del suelo pélvico, se debe tratar activamente la prolapsia en el síndrome de descenso del periné asociado con invaginación rectal o prolapsus rectal, para romper el ciclo vicioso del síndrome de descenso del periné, el esfuerzo excesivo al defecar y la prolapsia. Primero se utiliza el tratamiento con inyecciones, se refuerza el ejercicio de elevación del ano, y los resultados son muy buenos.
II. Tratamiento quirúrgico
Para los casos que no responden al tratamiento con inyecciones o que tienen una invaginación rectal interna, se puede realizar una cirugía para corregir la invaginación rectal. Sin embargo, debido a que el síndrome de descenso del periné está acompañado de una disfunción de los músculos del suelo pélvico, incluso si se realiza una fijación o suspensión rectal abdominal, es posible que queden algunos síntomas posteriores.
Dado que el síndrome de descenso del periné está acompañado de algún grado de disfunción de los músculos del suelo pélvico, los médicos clínicos deben evitar la fisioterapia de dilatación del ano para evitar que se agrave el daño a los esfínteres, lo que puede llevar a la incontinencia anal postoperatoria.